Osteocondrosis de la región cervical: síntomas y cómo tratar

dolor en la osteocondrosis cervical

La osteocondrosis cervical es una enfermedad de la columna vertebral que se desarrolla en un contexto de degeneración y distrofia de los tejidos de los discos intervertebrales en el cuello. La enfermedad puede complicarse con paresia y parálisis de las manos, isquemia y accidente cerebrovascular. Es por esta razón que la detección de cualquiera de sus síntomas debe convertirse en la base para una visita a un ortopedista, neurólogo o vertebrólogo, que sepa exactamente cómo tratar la osteocondrosis cervical, y el curso posterior de la terapia de acuerdo con el esquema elegido por él. .

Osteocondrosis de la columna cervical y sus causas.

La osteocondrosis de la región cervical es una patología polietiológica. Puede ser provocado por:

  • trauma;
  • actividad motora reducida;
  • una estadía prolongada en una posición sentada (por ejemplo, al conducir un automóvil o trabajar en una computadora);
  • aumento de la carga en la columna vertebral;
  • características congénitas en la estructura de la columna vertebral;
  • Enfermedad metabólica;
  • nutrición irracional;
  • abuso de alcohol, tabaquismo;
  • enfermedades infecciosas;
  • envenenamiento;
  • hipotermia;
  • la aparición de depósitos de sal en la zona del cuello.

Junto con esto, los factores que aumentan la probabilidad de patología son las enfermedades autoinmunes y las alteraciones hormonales.

Síntomas de la columna cervical: síntomas.

El síntoma principal de la osteocondrosis de la columna cervical es un dolor intenso en la parte posterior de la cabeza y el cuello. Las sensaciones desagradables pueden irradiarse a la cintura escapular y los brazos, volverse más pronunciadas al estornudar, toser e intentar girar la cabeza. Los síntomas secundarios de la enfermedad son:

  • debilidad general, disminución del tono corporal;
  • aumento de la fatiga;
  • dolor de cabeza;
  • entumecimiento de la mano;
  • mareo;
  • pérdida de consciencia;
  • ruido en los oídos;
  • crujidos en la zona del cuello al moverse.

En las últimas etapas, el paciente puede tener disminución de la agudeza auditiva y visual. En algunos pacientes, el desarrollo de la patología se acompaña de la aparición de dolor torácico.

Cómo tratar la osteocondrosis de la columna cervical.

Los trastornos degenerativos-distróficos en los tejidos del segmento superior de la columna vertebral se tratan con métodos conservadores. Traumatólogos-ortopedistas, vertebrólogos y neurólogos recomiendan a los pacientes:

  • asegúrese de que el motor descanse en el área afectada (para esto, es recomendable usar un dispositivo especial Shants collar);
  • tomar medicamentos antiinflamatorios no esteroideos, relajantes musculares, vitaminas y complejos minerales;
  • use pomadas y cremas anestésicas;
  • hacer inyecciones de corticosteroides (con síndrome de dolor severo);
  • participar en ejercicios terapéuticos, natación;
  • seguir una dieta que proporcione una mayor ingesta de proteínas y fibra;
  • tomar cursos de procedimientos fisioterapéuticos, terapia manual, masajes, acupuntura dentro de los límites de tiempo establecidos por el médico;
  • evitar situaciones de estrés, hipotermia, lesiones en el cuello, exposición prolongada a posiciones incómodas.

En los casos en que los métodos de tratamiento conservadores no ayudan a eliminar los síntomas de la osteocondrosis cervical, se remite al paciente para cirugía. Durante la cirugía, el médico:

  • elimina los discos intervertebrales afectados o sus fragmentos;
  • instala implantes que reemplazan los segmentos destruidos;
  • estabiliza las vértebras;
  • lleva a cabo la restauración con láser de los tejidos destruidos.

El tratamiento oportuno de la osteocondrosis de la columna cervical puede reducir la intensidad del dolor, ralentizar el desarrollo de la enfermedad, restaurar la capacidad del paciente para trabajar y evitar complicaciones peligrosas de la enfermedad.